Rechazamos enérgicamente esta modificación impulsada por el propio oficialismo provincial y avalada por gran parte de oposición.
El desarrollo productivo sostenible de Mendoza es la agricultura y la misma es limitada por el uso del agua. Hoy, los legisladores que votaron el cambio serán recordados por la historia como los grandes culpables de cada derrame de sustancias toxicas que se produzca sobre nuestras aguas, atentando contra la vida de miles de mendocinos.
Hoy es un día muy triste para nuestra provincia, ya que el origen de la ley 7722 demandó para su creación el trabajo en comisiones en cada rincón de Mendoza, donde luego fue creada con el consenso social y asegurando el bienestar de futuras generaciones.
Esperamos que los vergel que generaciones tras generaciones costo conseguir desarrollar en el desierto no vuelvan a su estado natural por falta de agua, o lo que sería peor por aguas contaminadas con sustancias mortales tanta para las plantas como para la vida humana.
Hoy, con una legislatura vergonzosamente vallada y con varios cortes en la provincia en manifestación por la NO modificación de la ley, se borró con el codo lo que se escribió con las manos de miles de mendocinos.
A los legisladores se los vota para representar al pueblo y esta es la prueba más cabal de los últimos tiempos de democracia en Mendoza, donde el poder monopólico de las empresas mineras corrompió la hidalguía de los legisladores que votaron a favor.
Esta traición al pueblo mendocino será recordada tristemente por varias generaciones. Por ello, Federacion Agraria Argentina se declara en estado permanente de asambleas ante tan aberrante hecho.